Los Spa, una fórmula de evadirse en aumento

Los Spa cada vez son más frecuentados en España. La vida diaria que tenemos, llena de estrés y preocupaciones es pasto adecuado para que se produzca el estrés, depresiones y demás enfermedades relacionadas con un modo de vida poco saludable que llevamos en las grandes ciudades.

Los spas urbanos cada vez están más de moda y por motivos evidentes, son una magnífica forma de evadirse y el cuerpo nos lo agradece, en forma de placenteros momentos en los que uno parece que está en otro tiempo y lugar.

Mi pareja y yo, por ejemplo, somos un claro ejemplo de sus beneficios. Entre semana con los horarios de uno y de otro, no podíamos vernos mucho. Esto cuando llevas poco de pareja se puede sobrellevar, pero más tiempo sí que comienza a afectar gravemente a la pareja.

Por todo esto, nos animamos a buscar un masaje en un spa que mereciese la pena. Una pareja amiga de mi mujer desde el instituto nos recomendó evasiomspa.com, un centro de masajes del que nos habló tantas maravillas, que terminamos llamando y concertando una cita.

La verdad que cuando llamamos pudimos constatar que es un sitio muy demandado, pues fue más complicado de lo previsto encontrar un hueco en aquella semana y tuvo que ser para la siguiente. En cuanto a masajes, la verdad que no controlamos demasiado, pero, una vez más hicimos caso a sus amigos y contratamos la modalidad de Tradicional Thai, de la que nos contaron que era uno de los masajes más legendarios de aquella cultura asiática.

En que consiste el masaje “Tradicional Thai”

Es un masaje exótico, único y legendario. Está basado en la presión de los distintos puntos energéticos y en estiramientos, para equilibrar la energía y liberar bloqueos, lo que produce unos resultados inmejorables, estimulando y tonificando el cuerpo, la mente y el espíritu.
Indicado para reducir tensiones e incrementar la vitalidad. El masaje se realizó en un tatami y sin aceite, poniéndonos una ropa especial para poder recibir el masaje Thai que duró del orden de 90 minutos.

Después de acabado el masaje, la verdad es que al levantarme parecía que se me hubiese olvidado andar, pues estaba como levitando. Me dejaron como nuevo no solo en lo físico, hasta se me fue el dolor de cabeza que tenía cuando entré al Spa. Un clima muy cuidado y las expertas manos de los profesionales ciertamente hicieron magia.

Nos gustó tanto que hemos decidido cada mes o dos meses, pasarnos a que nos den una buena sesión. En este Spa tienen tantos tipos diferentes de masajes, que lo mejor será probarlos todos y así decidir cuál es nuestro favorito ¿No?

Si eres de esos que dudan de la efectividad de los masajes y pensáis que solo es un pasamanos muy caro, estáis equivocados. Si tienes una mala época y estás estresado, te recomiendo que buques un buen Spa de confianza o del que tengan buenas opiniones sus usuarios para ir a él u dejarte llevar por los masajes y las buenas sensaciones que causarán en tu cuerpo.

El masaje ha existido siempre y es una magnífica manera de desconectar del mundanal ruido. Yo una vez lo he probado de verdad realizado por un profesional, comprendo que sean tan bien valorados cuando son verdaderos profesionales, pues hacen verdadera magia con sus manos.

Algo también que me encantó es la higiene con la que realizan todos sus trabajos, lo que supone un plus extra a la hora de optar por un sitio u otro. Nosotros vamos a seguir yendo aquí, pero vosotros al que vayáis, estaros muy atentos de estos detalles que quieras que no son los que marcan las diferencias.

Ahora, después de haber comprobado los beneficios que tienen los spas y el mundo del masaje, entendemos porque cada vez proliferan más en nuestras ciudades, realmente necesitamos algo así.

Antes de acabar, me gustaría hacer referencia a la magnífica decoración que había en nuestro spa, algo que ayuda a ponerse en situación. Lo digo porque ya que estáis, siempre es bonito acudir a alguno que no tenga alguna temática exótica o diferente, al final se agradecen estas cosas y es más especial acudir al sitio en cuestión.

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