Como cada año cuando se acerca Halloween, y del mismo modo en el que ocurre cuando se acerca la época del Carnaval, los medios de comunicación empiezan a hacerse eco de lo que miles de familias ya llevas denunciando desde hace años: los disfraces infantiles que se venden actualmente no son adecuados para la edad de nuestros hijos. Disfraces hipersexualizados, violentos e insalubres son los que más abundan en las tiendas de barrio y grandes superficies, a no ser que decidamos hacerles nosotros mismos el disfraz. Pero ¿por qué nuestra sociedad a ha permitido esto? ¿Por qué nos estamos dirigiendo cada vez más hacia una hipersexualización infantil en todos los sentidos?