
Os puedo asegurar que no merece la pena gastarse una fortuna en la ropa de nuestros hijos, debe ser duradera y de calidad, pero también tenemos que tener claro que tanto la ropa como el calzado sufren bastante el día a día. Al pasar los meses me convencí de ello, busqué tiendas que tuvieran una buena relación calidad precio